Uno de los elementos principales para una vida sana es la actividad física. Comiendo sana y balanceadamente se puede tener un peso recomendable, pero es la actividad física la que marca la diferencia a la hora de prevenir enfermedades (como la diabetes, enfermedades del corazón, hipertensión, etc.) y quemar calorías.
Tener un peso saludable en nuestra vida adulta puede parecer terriblemente difícil, ya que generalmente se dice que no hay tiempo para hacer ejercicios, ni cocinar los alimentos seleccionados de una lista escrita por un nutricionista. Estas barreras autoimpuestas son solo obstáculos que nosotros mismos nos ponemos entre el camino hacia un estilo de vida saludable.
Todo conspira para que no lo hagamos. Desde los comerciales de comida, los precios restrictivos de algunos productos “naturales”, el sesgo por las actividades tachadas de sanas e incluso nuestras parejas o familia.
Tenemos que ponernos metas, y esto siempre esta asociado a la voluntad. Existe una infinidad de sitios con información gratuita (nosotros queremos sumarnos como sitio a esa iniciativa), cursos ofrecidos en grupos o municipios, programas de televisión o videos en youtube que ayudaran a que logremos nuestra meta. Las verduras y frutas de estación harán la diferencia entre lo que comemos, ya que al final uno de los dos pilares de este cambio radical en nuestro estilo de vida es la comida.
Tener una vida mas activa no significa perder horas y horas en el gimnasio, es simplemente cambiar el switch. Elegir no quedarse en cama el fin de semana, no tomar el auto para ir al supermercado, elegir caminar, andar en bicicleta, o simplemente dar un paseo a algún parque en tu ciudad. Esto marca la diferencia entre aprovechar de mejor manera lo que tenemos a disposición. Se ha puesto de moda el instalar gimnasios al aire libre, y demás infraestructura que esta a disposición nuestra.
El cambio realmente viene desde adentro, la visión de que es lo que queremos para nuestra vida, y cuan llevadera queremos que esta sea es lo que delimitara si nuestra voluntad estará acorde al desafío.
Se acerca el verano (al menos en este hemisferio) y con ello el tiempo mejora. Saca provecho de los días soleados para recorrer los fines de semana las ferias y mercados en busca de ingredientes frescos (y mucho mas baratos) para incorporarlos a tu dieta.
Si no te gustan mucho las ensaladas, prepara sopas, cremas, batidos o jugos. La imaginación es el limite y nuestro cuerpo quien es el que recibirá todos los beneficios.
Piensa en ello como un inversión a futuro. No por nada los gobiernos incentivan la vida sana ya que con ello disminuyen su gasto en salud publica. Desde esta perspectiva es obvio que a quien mas le conviene estar en forma y con un estilo de vida balanceado es a nosotros mas que a nadie. Por que la principal herramienta para poder disfrutar de lo que tenemos (familia, amigos, etc.) es nuestra salud.
Tener un peso saludable en nuestra vida adulta puede parecer terriblemente difícil, ya que generalmente se dice que no hay tiempo para hacer ejercicios, ni cocinar los alimentos seleccionados de una lista escrita por un nutricionista. Estas barreras autoimpuestas son solo obstáculos que nosotros mismos nos ponemos entre el camino hacia un estilo de vida saludable.
Todo conspira para que no lo hagamos. Desde los comerciales de comida, los precios restrictivos de algunos productos “naturales”, el sesgo por las actividades tachadas de sanas e incluso nuestras parejas o familia.
Tenemos que ponernos metas, y esto siempre esta asociado a la voluntad. Existe una infinidad de sitios con información gratuita (nosotros queremos sumarnos como sitio a esa iniciativa), cursos ofrecidos en grupos o municipios, programas de televisión o videos en youtube que ayudaran a que logremos nuestra meta. Las verduras y frutas de estación harán la diferencia entre lo que comemos, ya que al final uno de los dos pilares de este cambio radical en nuestro estilo de vida es la comida.
Tener una vida mas activa no significa perder horas y horas en el gimnasio, es simplemente cambiar el switch. Elegir no quedarse en cama el fin de semana, no tomar el auto para ir al supermercado, elegir caminar, andar en bicicleta, o simplemente dar un paseo a algún parque en tu ciudad. Esto marca la diferencia entre aprovechar de mejor manera lo que tenemos a disposición. Se ha puesto de moda el instalar gimnasios al aire libre, y demás infraestructura que esta a disposición nuestra.
El cambio realmente viene desde adentro, la visión de que es lo que queremos para nuestra vida, y cuan llevadera queremos que esta sea es lo que delimitara si nuestra voluntad estará acorde al desafío.
Se acerca el verano (al menos en este hemisferio) y con ello el tiempo mejora. Saca provecho de los días soleados para recorrer los fines de semana las ferias y mercados en busca de ingredientes frescos (y mucho mas baratos) para incorporarlos a tu dieta.
Si no te gustan mucho las ensaladas, prepara sopas, cremas, batidos o jugos. La imaginación es el limite y nuestro cuerpo quien es el que recibirá todos los beneficios.
Piensa en ello como un inversión a futuro. No por nada los gobiernos incentivan la vida sana ya que con ello disminuyen su gasto en salud publica. Desde esta perspectiva es obvio que a quien mas le conviene estar en forma y con un estilo de vida balanceado es a nosotros mas que a nadie. Por que la principal herramienta para poder disfrutar de lo que tenemos (familia, amigos, etc.) es nuestra salud.